Una raza pura es aquella que es capaz de aceptar a cualquier ser, sin importar el color y la categoría social que represente.
La pureza está en quién expresa la virtud del AMOR por encima de lo personal. Es la inspiración para estos tiempos.
La pureza está en no desarrollar en sí mismo la impureza de la separatividad, del odio y del rechazo de cualquier tipo.
El que trasciende eliminando lo Humano genera en sí la impureza de la inhumanidad, pues no valora que las diferencias son riqueza de intercambios.

Ante lo que no puedes prever, saltan tus prejuicios, anteponiéndose por encima de la certeza

El calor Humano empieza a ser algo muy preciado por su carencia y su necesidad, pues alimenta la substancia vital de estos tiempos, la CONCIENCIA.

Hay asuntos que se van a manifestar como importantes carencias, y que sin ellos la evolución toma otros caminos. Van a necesitarse como el aire para respirar… La INTEGRIDAD se fundamenta en este calor Humano.

Meritxell Castells 6/6/2014

(photo Mike Hammerton)