SOLUCIÓN AL CONTROL: LA COHERENCIA, CUANDO TODO TIENE SENTIDO

LibertadEn momentos donde todo es posible…los asuntos de poder se están definiendo…y además no está establecida la primera identidad, controlar es una salida fácil, una manera mediocre de ser algo.

El que controla está en su derecho de hacerlo, y desde el poder, favorece todas las opciones que abren posibilidades a que la sociedad se exprese. Os expliqué que estamos dejando de ser previsibles, pero la red se presta a ser un mar con nuestras informaciones donde todos tienen acceso. De esta manera, pueden interferir en alguna parte de nosotros.
Así pues, el control y las opciones que hablan de quienes somos no van a desaparecer, y no tienen por qué hacerlo, pues tienen sentido para ciertos desarrollos. Que alguien ponga su vida en la red sirve de conocimiento, pues la información de lo que somos es muy valiosa…muy rica. El uso que se haga de esta información hará que crezcas con ella o no.
Todo lo que entra en la red, puede ser espiado, es una realidad que debemos saberla, fijaos que el tiempo nos lo trae, todo sale a la luz…nuestra información y las acciones que se realizan sobre ellas. No se escapa nada.

Pero esto es lo de menos… Pues lo único que pueden extraer son datos de nuestros gustos, de nuestra vida, para influenciar en nuestro medio y «educarnos» de una manera concreta. Los valores que recibimos pueden partir de una familia, pero en el fondo parten de la educación a la «familia social». Nos han inculcado una manera de ser, bastante contraria a la idea de ser un individuo independiente. Lógico, es un control dirigido a la sociedad como grupo. Aún así, esto no es relevante…pues nada se ha hecho con sometimiento. Todo ha sido una cesión voluntaria de nuestro poder. Querían controlar a la sociedad y a esta le ha parecido bien. Esta afirmación os puede parecer absurda, pero tiene sus fundamentos. La individualización requiere empezar a tomar decisiones, y no escoger un líder o un profesional de la salud para que lo haga por nosotros. La sociedad está en su mayor parte asumida en un «Peter pan» perenne… Es algo de cada uno, lanzarse al primer vuelo, y haciéndolo es como se aprende.

El problema está cuando este acto de posesión llega a una fase avanzada de esa laboriosa tarea hacia un individuo. Dejamos de ser previsibles porque nos estamos diferenciado. Entonces, todo ese trabajo realizado en nuestra historia, que ha sido hacia la sociedad colectiva, ahora no sirve. El avance del control ha de ser en campos individuales. Y aquí, hay que entrar dentro.

El cerebro es físico, y en gran parte previsible. Todo lo que se puede definir puede ser producto de mercado. Los datos que ofrecemos individualmente en las redes sociales, por ejemplo, se acercan pues son un aspecto externo de lo que hay dentro, más cierto o no. Esta información como información puede venderse, y ya se hace, pero a lo que me refiero es al control de nuestras emociones. Hacer que la sociedad se incline hacia ciertos gustos, o estados emotivos es algo perfectamente controlable desde la información de nuestro entorno, siempre que dicha sociedad, grupo o individuo no sea amo de su vida. Por otro lado está avanzando la nano-tecnología hacia el control de los estados de salud. Sea la «excusa» que sea para entrar, el hecho de que nos controlen o no depende de nosotros mismos.

¿Cómo hacer que no nos controlen? Independientemente que sepan más o menos de nosotros, lo que importa es que llegue o no la información que emiten para ese fin, y eso lo detectamos con la coherencia que cada uno tenga con lo que hace.
No hay nada más privado que la propia conciencia, y esto es algo que puede estar en todos sitios.

Todo lo que hacemos tiene un sentido dentro de una linea temporal. Es una pieza del puzzle de nuestra historia, justo con las historias de otros, formando más coherencia todavía. A la historia que podemos acceder y verificar es la nuestra, pues cada uno se mueve con la propia conciencia, y es lo que permite llegar al sentido de tus actos.
Esta es la clave, desarrollar la capacidad de ver el sentido en todo lo que entra en nuestro campo de interacción. Es un acto que coge el control de la propia vida. A partir de aquí no actúas por inercia, ni por voluntad de otros, actúas con tu propia voluntad. Hay un aspecto que quiero matizar, la falsa seguridad…algo muy habitual y que puede confundirse con lo que estoy explicando. Una persona puede decir y pensar que tiene las ideas muy claras, y que actúa con seguridad y sentido. Si es un engaño, si está controlado por una voluntad que no es la suya, condicionado, no podrá ejercer esta coherencia. Esto es detectable pues este tipo de personas, suelen creerse en ideas muy fundamentadas, y las respaldan con ideas impuestas como verdad, fundamentadas en intereses que no solo no ven, sino que tachan. La clave es ver que hay algo en su «fanatismo» que no cuadra.
La verdad se expresa como coherencia, y todo encaja. En la sociedad, en la historia siempre han aparecido tiranos, corruptos…pero la verdad siempre acaba triunfando, pues es la que expresa la estructura de los eventos de la evolución del individuo…y de la humanidad, algo que representa un pilar en la historia.

Escrito por Meritxell Castells 24/9/2013

 

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