LA HERIDA

No hay mayor dolor que el que se hace uno mismo al no creer en su existencia.

La herida es parte del acontecer del existir, es la crisis a la que la propia vida se enfrenta, la opción de seguir existiendo como previsibilidad…o trascender, expresando su máxima creación demostrándose a sí misma su potencial.
Somos protagonistas de esta historia de la materia, viviendo en nosotros el cambio substancial de una nueva forma de existir. La simbiosis del acontecer de la Substancia elemental humana.
Somos expresión de su duda, de su continuidad.

Para nosotros es ya nuestra historia…

El máximo dolor se produce en la no creencia

Y, ¿por qué no crees si sabes? ¿O no quieres saber?
La verdad está ahí, con necesidad a ser vista.
Nuestro poder, ¿Dónde está?
La Verdad, el Poder no han sido ocultados, porque están en cada uno de nosotros.
¿Por qué no queremos verlo? ¿No hay voluntad? Si la hay…para otras cosas. Las direcciones las dirigimos a pequeños asuntos… El poder humano es algo de grandes asuntos, es algo de asuntos humanos. Si no eres humano no te interesa…lógico. No toca.

¿Que nos pasa? ¿Queremos saber quien somos? Acercarnos nos calma, alejarnos nos embrutece, pues llena de miedo nuestro sentido y la separatividad ya no es definición sino extrañeza. ¿Dónde queremos estar?

El poder de decisión está ahora en Ti mismo